La espada de Godric Gryffindor, hecha por duendes, es de plata y tiene rubíes incrustados. Perteneció al fundador de Hogwarts: Godric Gryffindor.
Esta espada está limpia, pero conserva lo que "la hace más fuerte" como el veneno de Basilisco. Los duendes sostienen que él se la robó a Ragnuk el Primero simplemente porque fue construida por ellos. Godric no la robó. Sólo los verdaderos Gryffindors pueden portar la espada, tal el caso de Harry Potter y Neville Longbottom.
Albus Dumbledore deja la espada a Harry en herencia, pero el Ministerio no lo permite. La utilizan para destruir horrocruxes, después de que quedase impregnada por veneno de basilisco. Harry le promete a Griphook la espada a cambio de ayuda para entrar a Gringotts pero Neville la recupera después a través del Sombrero Seleccionador matando con ella a Nagini.