Investido caballero por el Rey Arturo, Sir Lancelot se convirtió en uno de los personajes más célebres y legendarios de la "Tabla Redonda". La propia reina Ginebra fue su dama el día que tomó los votos de caballería. En la conquista del castillo de la "Dolorosa Guarda" descubre sus orígenes: hijo del rey Ban de Benoic, que perdió su reino y envió a su hijo Lancelot a la corte de Arturo, acompañado de La Dama del Lago, a ser investido caballero.
Su relación amorosa con la propia reina Ginebra le hizo medirse con todos los caballeros de la Tabla Redonda que querían salvar el honor mancillado de su señor Arturo. Lancelot, después de vencerlos uno a uno, se retira voluntariamente a un monasterio para hacer penitencia. Antes de morir, La Dama del Lago viene en su ayuda y con ella se sumerge por siempre bajo las aguas de éste.