Las tazas celtas hechas con asta de cuerno han sido utilizadas desde la época medieval, y son una muestra de la habilidad y destreza de los artesanos de la época. Estas tazas eran populares entre los guerreros celtas, quienes las utilizaban para beber hidromiel, una bebida alcohólica fermentada a base de miel.
El cuerno utilizado para hacer estas tazas era generalmente de ciervo o búfalo, y era tratado para evitar la putrefacción y el mal olor. Las tazas celtas hechas de asta de cuerno eran consideradas como un símbolo de estatus, y se utilizaban en banquetes y festivales importantes.
Hoy en día, las tazas celtas hechas de asta de cuerno se han vuelto populares entre los entusiastas de la historia y los coleccionistas de objetos medievales. Cada taza es única debido a las variaciones en el color y textura del asta de cuerno, lo que las convierte en piezas únicas e interesantes para exhibir en cualquier colección.