La Jarra vikinga Fenrir el Lobo Nórdico es el complemento perfecto para aquellos que deseen sumergirse en el apasionante mundo de la cultura vikinga. Con una capacidad de 650-800 ml, esta jarra rústica y altamente decorativa se adapta tanto a entornos medievales como a hogares modernos, convirtiéndose en un auténtico punto de atracción en cualquier mesa de comedor.
Pero esta jarra no solo se destaca por su estética, sino también por su funcionalidad. Está sellada en el interior con un barniz apto para alimentos, lo que garantiza la máxima higiene y te permite disfrutar al máximo de tu cerveza favorita, o incluso de una deliciosa hidromiel.
¿Buscas el regalo perfecto para un vikingo moderno? Esta jarra es una gran idea. Su diseño inspirado en el lobo nórdico Fenrir hace referencia a la mitología vikinga y aporta un toque de autenticidad a cualquier colección o reunión temática.
Con una altura de 15 cm, esta jarra es lo suficientemente compacta para transportarla fácilmente a cualquier evento o fiesta vikinga. Además, su peso, que varía entre 350-450 gr, te permite disfrutar de tus bebidas favoritas sin renunciar a la comodidad.
Si eres amante de la historia, las películas o los videojuegos relacionados con la temática vikinga, esta jarra vikinga Fenrir el Lobo Nórdico se convertirá en un auténtico tesoro para ti. Revive las épicas batallas y las leyendas de esta fascinante cultura mientras disfrutas de tus bebidas favoritas en esta auténtica joya.
No pierdas la oportunidad de tener en tus manos esta jarra vikinga Fenrir el Lobo Nórdico. Será el centro de atención en cualquier ocasión y te transportará a una época llena de valentía y aventuras. ¡Hazte con la tuya ahora!
Esta taza/jarra de tamaño generoso con asa está hecha a mano con cuerno de ganado, pulida y adornada con un motivo grabado del lobo Fenrir (también Fenris o Fenrisúlfr).
En la mitología germánica, Fenrir, hijo del dios malicioso Loki y la giganta Angrboda y uno de los verdugos del mundo, lucha contra el orden existente y finalmente encarna la aniquilación del mundo. Los dioses reconocen su peligrosidad, lo encadenan a una roca con una artimaña y lo hunden profundamente en el fondo de la tierra. El lobo está encadenado durante mucho tiempo, hasta que finalmente, en el crepúsculo de los dioses, rompe sus cadenas y devora a Odín. El hijo de Odín, Widar, mata a Fenrir, pero es demasiado tarde, cae el Padre de los Dioses y, con él, el orden del mundo.
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